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Estimula las reservas
Una buena manera de aumentar el control de los grupos es estimular un buen sistema de reservas e informar a los clientes que en fechas señaladas se funcionará con antelación, tanto para asegurar mesa como para poder ofrecer un buen servicio y menú. En esta línea, es importante que los clientes vean como pueden reservar mesa, ya sea a través de llamada telefónica, desde la web o desde algún portal, como ElTenedor, TripAdvisor o Atrapalo.
Adecua el espacio a las necesidades de cada turno
Para saber cómo deberás distribuir el espacio del local, primero debes tener conocimiento del número de personas que forman parte del grupo que vendrá y, en su caso, cuántos grupos en total deberás acoger en el turno. La tendencia es que, durante fechas señaladas, como las fiestas de Navidad, el espacio esté más limitado.
Por lo tanto, es importante encontrar el punto de equilibrio entre la cantidad de personas y la calidad del servicio. Tener espacio y sentirse cómodo son aspectos esenciales para que nuestros clientes puedan tener una buena experiencia.
Por otra parte, las características del servicio exigirá una buena limpieza tan rápida como sea posible, y tener siempre preparadas más mesas, sillas y utensilios, por si acaso.
Idea un menú para grupos
Una buena solución para gestionar el servicio con eficacia es preparar y cerrar un menú para grupos. De esta manera, podrás anticipar los productos que necesitarás y trabajar dentro de un margen de beneficio. Es importante que el menú lo muestres de una manera simplificada, clara y concreta, ya que de esta manera los clientes escogerán a sus platos más rápidamente. Además, también puedes empezar con un primer plato fijo, como un refrigerio, así agilizarás el servicio y podrás empezar a preparar con mayor antelación.
Atiende a los clientes sin nervios y si hace falta ... ¡improvisa!
Es normal que cuando nos encontramos con un servicio con muchas personas en la mesa, pueda aparecer el estrés y los nervios. Por ello, es importante tener paciencia y tranquilidad, ya que de esta manera nos aseguraremos que trabajamos con atención y conciencia. Si das un buen servicio y calculas bien la cantidad de personas por turno, no debe haber ningún problema. Simplemente, se trata de ir poco a poco y trabajar en equipo.
También, tendremos que tener en cuenta otros factores que pueden surgir sobre la marcha como el ruido que pueda hacer un grupo en concreto, que las personas de un grupo vayan llegando separados o que haya bajas o altas de última hora. Así que cabeza fría y actúa con claridad y rapidez, entendiendo que la improvisación puede ser una de tus mejores aliadas.
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